Trabajar
en el club
En el Club de Madres entendemos que, a veces, las mamás necesitan sacar adelante alguna tarea puntual de trabajo: enviar un email, hacer una videollamada, preparar un informe o simplemente tener un momento de concentración con el ordenador. Por eso, dentro del espacio, contamos con mesas disponibles donde las mamás pueden trabajar con su bebé cerca, en un entorno amable y pensado para ambas.
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Sabemos que muchos lugares no están diseñados para esta etapa de la vida, por eso el Club abre sus puertas a quienes buscan justamente lo contrario: un lugar donde ser mamá y ser una misma puedan convivir en armonía.
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Dicho esto, es importante aclarar que el Club no es un coworking. No está pensado para un uso laboral diario o continuado. No contamos con la estructura, el mobiliario ni la disponibilidad de espacio para ofrecer ese tipo de servicio de forma constante. Si todas las socias usaran el espacio como coworking, dejaríamos de poder cumplir con nuestro propósito principal: acompañar a las madres con sus bebés en un entorno de encuentro, juego y cuidado compartido.
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Nos encanta cuando las propias mamás se organizan y se apoyan entre ellas. Si un grupo de socias quiere turnarse para cuidar a los bebés mientras otra trabaja, nos parece hermoso y nos motiva mucho ver ese tipo de redes. Pero también es importante entender que el Club no puede funcionar como un espacio exclusivo para eso. Por ejemplo, si seis mamás se organizan para turnarse entre cuidado y trabajo todos los días, esto ocuparía gran parte del espacio, y no podríamos ofrecer nuestras actividades ni asegurar que el resto de las socias también puedan disfrutar del club.
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Por eso, vemos cada caso de manera individual, con cariño y con voluntad de apoyar. Queremos que el Club siga siendo un lugar donde conciliar sea posible, pero sin dejar de lado su espíritu: ser un espacio de acompañamiento, encuentro y comunidad para madres y bebés.
Gracias por entenderlo y por construir juntas este espacio único. 💛